POR ALEJANDRO SANTANA.
Usualmente  los periodistas no nos inmutamos frente a las muertes de las personas,  porque en el diario trajinar de las noticias hemos  asumido  como algo normal que una persona muera y aunque nos mostremos  solidarios con sus familiares mas cercanos y hasta ofrezcamos nuestras  condolencias, mayormente lo hacemos como un cumplido que está  dentro del formulismo protocolar de los seres humanos.
Pero  hay muertes que de manera especial impactan a cualquier persona aunque  esté revestida de una coraza de insensibilidad y que esté claro que lo  único seguro en la vida, es la  muerte y que al transitar el camino de la vida el precio que tenemos que pagar a la hora de hacer nuestras cuentas con  nuestro creador.
La  muerte de don Onésimo Alcántara, ha logrado impactar a los periodistas  de esta localidad que de una forma u otra hemos estado en contacto con  el ya como empleado de la entonces Corporación Dominicana de la Electricidad, como en otras funciones públicas y privadas que le toco desempeñar a lo largo de su existencia.
Pero dentro de esas funciones desempeñadas habría que  resaltar sus funciones en el ayuntamiento local, una institución difícil por su constante contacto con  representantes de los diferentes extractos sociales de esta comunidad.
Don  Onésimo, como asistente del sindico o alcalde municipal, siempre fue un  mediador, un representante a la altura de las circunstancias  que  le tocó enfrentar en esa alcaldía, no fue persona que hacia distinción  de personas a la hora de escacharlo exponiendo una queja o tramitando  una solicitud y cuando se encontraba con cualquiera de los periodistas  en esa alcaldía, se detenía a indagar si lo estaban atendiendo o que  hacia falta para terminar una diligencia.
Por  tal razón, por su comportamiento como funcionario, por su afectividad  frente a las personas, por su manera sencilla en el trato, por su  humildad en la vida, por su honradez, integridad y moral, tres elementos  últimos de los que carecemos. A don Onésimo lo engalanaban y eso mas  que otra cosa es lo que  ha logrado hacer que los periodistas de esta parte del país hoy estemos conmovido por su muerte que dejara un gran vacío en la  alcaldía local, nuestras condolencias sinceras a sus familiares  y  a nuestro alcalde que de seguro esta otra pena que le causa la muerte  de un ser querido, lo impactará profundamente por ser una persona  humanamente sensible.
 
 


 
 
 
 







0 comentarios:
Publicar un comentario